martes, 22 de mayo de 2007

Complicadas



La niña mala del rock criticó a la ex princesa del pop Britney Spears por robar protagonismo explotando su sexualidad y así vender su música.
Decidida a expulsar sus demonios en una sola entrevista, la cantante canadiense Avril Lavigne se deshizo además de sus camisetas talla XL.
La menuda intérprete de Complicated posó en topless a lo Bolocco, pero tapada por un letrero que decía "demonios, estoy caliente". Ella sale fumando y bebiendo, para la edición de junio de la revista Blender donde admitió que tiene problemas con la bebida.
Lavigne dijo que bebe "como una hija de puta", pero que está empezando a madurar, tras su matrimonio con el también músico Deryck Whibley.
Luego afiló su inquina contra Britney Spears y la tildó de "loca y estúpida" por usar su cuerpo y problemas personales para ganar notoriedad. Como diría chaparrón Bonaparte, la gente cree que tú y yo estamos locos lucas.

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